Las muñecas de porcelana se rompen de una forma tan fácil...El niño las quita de la repisa y las arroja al suelo, muy bien, házlas trizas, cada muñeca rota es una punzada de dolor en tu pecho.
Te duele. Te duele mucho ahora.
Llorá hasta que te ardan los ojos y sientas que tu cabeza está a punto de explotar.
[Quiero estar con ella para siempre]
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